Una explicación de la toma de decisiones editoriales en la noche de la entrega de los premios de los jugadores profesionales de fútbol
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado
El dedo en la llaga lo ha puesto esta semana Estela Vidal, que expresa en un correo su “profunda decepción por el tratamiento que han dado en su edición online a la histórica hazaña de Aitana Bonmatí, quien acaba de conquistar su tercer Balón de Oro consecutivo”. La lectora cuestiona que EL PAÍS dedicara a la categoría masculina el titular de la entrega de los premios anuales de la revista francesa France Football a los mejores jugadores profesionales, en lugar de mencionar juntos a los dos principales galardonados, Aitana Bonmatí y Ousmane Dembelé.
“El logro de Bonmatí aparece relegado al subtítulo, a pesar de que se trata de una gesta sin precedentes”, añade. Solo los futbolistas Michel Platini y Leo Messi han logrado antes tres premios consecutivos, aunque este último haya ganado más veces (ocho), al igual que Cristiano Ronaldo (cinco). Por eso, reclama a EL PAÍS que revise sus criterios de relevancia: “Este tipo de decisiones editoriales perpetúan la desigualdad y restan valor a los éxitos de nuestras deportistas”.
Para explicar lo sucedido es necesario analizar la toma de decisiones:
Logística. “Comparto las inquietudes de esta lectora”, dice la redactora jefa de Deportes, Nadia Tronchoni. “Había dos razones de logística periodística”. La primera es que, junto a la crónica general de los premios, se publicó otra dedicada exclusivamente a la futbolista: Aitana Bonmatí, la líder excepcional que ya cuenta tres Balones de Oro. La norma, recuerda, implica no repetir ideas en el título de artículos que van enfrentados, como ocurría en la web y el papel.
La otra razón es que la jugadora del Barcelona no estaba en las quinielas, porque este año se le han escapado los títulos de la Champions y la Eurocopa. Ni siquiera ella se lo esperaba: “No me había preparado tan bien el discurso esta vez”, confesó tras la gala. “El premio llega a las 22.34”, recuerda Tronchoni. “El margen para cambiar el plan inicial es escaso, de 30 minutos. Y se hizo lo mejor que se pudo”.
Plan de trabajo. En los grandes eventos, las tareas se fijan con antelación para reducir la toma de decisiones de última hora. En esta ocasión el pronóstico señalaba dos grandes duelos: entre Ousmane Dembelé (del PSG) y Lamine Yamal (Barcelona) en la categoría masculina, que ganó el primero, y entre Alessia Russo y Mariona Caldentey (ambas del Arsenal), en la femenina. Por eso, Juan I. Irigoyen, el redactor que cubre el Barça, viajó a París para seguir la gala, ante la posibilidad de que Yamal fuera el más joven de la historia en lograr el premio. Mientras, Irene Guevara preparó una crónica por si ganaba la mallorquina Caldentey. A las 22.37, esta periodista recibió el siguiente mensaje de su jefa: “¿Te ves capaz de hacer 600 palabras [sobre Bonmatí] en media hora?”.
Horas de cierre. La gala comenzó a las nueve de la noche, una hora tardía para la edición impresa, que no podía esperar más allá de las 23.30 para llegar a las rotativas. Eso significa que los textos han de entregarse como muy tarde media hora antes. La sección de Deportes trabajaba simultáneamente para la web y el papel y, junto a las dos informaciones mencionadas, mantenía un relato en directo de la gala.
El inesperado triunfo de Bonmatí irrumpió en una noche muy cargada de noticias, que el subdirector del papel, Luis Barbero, recuerda “de absoluta locura”. En paralelo al Balón de Oro, la Redacción seguía las intervenciones de Emmanuel Macron y Pedro Sánchez en Naciones Unidas, la declaración de Trump en la que vinculó el paracetamol con el autismo, y el comunicado de Disney con la vuelta de Jimmy Kimmel tras suspender su programa. “Todas, noticias susceptibles de ir en primera, en menos de una hora”, recalca.
Titular complejo. El reto periodístico consistía en decidir qué resultaba más relevante. Por un lado, la historia de éxito del PSG, con cuatro galardones (jugador, equipo, entrenador y portero) y una trama muy vinculada a España, porque Luis Enrique, el entrenador español del conjunto francés, fichó en 2023 del Barcelona a un Dembelé cuestionado por sus continuas lesiones y lo ha elevado a estrella de un equipo multilaureado esta temporada. Por el otro, la hazaña de una jugadora convertida inesperadamente en la primera mujer que gana tres veces consecutivas el Balón de Oro y la tercera persona que lo logra en la historia de unos galardones que existen desde 1956, pero que no premiaron el fútbol femenino hasta 2018.
Audiencia y negocio. Miguel Jiménez, director adjunto, justifica la apuesta de la sección de Deportes de llevar la categoría masculina al titular en las cifras de seguidores y el negocio que mueve. “Le damos ya una prima de cobertura al fútbol femenino, cuando las cifras de uno y otro son muy diferentes, y defiendo que sea así”, añade. Recuerda que, además, se dedicó a la jugadora una información propia, además de que su logro figurara en el titular de primera página y en el subtítulo y el cuerpo de la crónica principal. En esta, añade, el título ( El PSG de Luis Enrique corona a Ousmane Dembélé como nuevo Balón de Oro) no se limita al galardón del jugador, sino que incluye los éxitos del equipo y el entrenador.
Conclusión. Desde el punto de vista profesional, los dos enfoques son correctos. El periodismo no es una ciencia exacta y los mismos hechos puede plantearse con perspectivas alternativas. Pero en una situación de presión informativa, el reflejo del periódico fue actuar de carril. Ojalá la reacción hubiera sido más audaz y hubiera puesto el foco en el hito histórico y no en el éxito anual, aunque solo se hubiera llegado a algunas ediciones. Con la perspectiva del tiempo, EL PAÍS publicó el miércoles un editorial que da la razón a la lectora Estela Vidal. No va de Dembelé ni de Luis Enrique, sino que aplaude la trayectoria de Aitana Bonmatí, ya una leyenda del fútbol mundial.
Para contactar con la defensora puede escribir un correo electrónico a defensora@elpais.es o enviar por WhatsApp un audio de hasta un minuto de duración al número +34 649 362 138 (este teléfono no atiende llamadas).
[SRC] https://elpais.com/defensor-a-del-lector/2025-09-28/balon-de-oro-aitana-bonmati-hace-historia-el-foco-es-para-ousmane-dembele.html